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martes, 17 de mayo de 2016

ad+...Carmen Pampín

Mañana, 18 de Mayo, es desde 1977 el Día Internacional de los Museos. La celebración de este Día nos ofrece la oportunidad de acercarnos al público y a la sociedad y de dar a conocer nuestro trabajo.
A nuestros voluntarios no les hace falta un día especial para adentrar a nuestros visitantes en el mundo de las artes decorativas. Cada semana cuentan a todo aquel que lo desea los secretos que encierran nuestras salas. Y es que un museo tiene mucho más que ofrecer que lo que se ve a simple vista porque cada pieza tiene detrás un contexto, una técnica, una historia. Y es también eso, lo que no se ve, lo que narran nuestros voluntarios. No nos cansamos de agradecerles su labor, que llevan a cabo con tanta alegría, su entrega y por supuesto, su tiempo. Son muchos los agradecimientos y felicitaciones que nos llegan de los visitantes que recorren con ellos las salas del MNAD. 
Hoy Carmen Pampín comparte con nosotros su experiencia como voluntaria en el MNAD. Os dejamos con sus palabras.

Siempre me ha gustado el ARTE, pero mi vida profesional me ha llevado por otros derroteros, por lo que mi incorporación como voluntaria al Museo Nacional de Artes Decorativas, me dio la gran satisfacción de estar en contacto y colaborar en aquello que yo quería.

Quiero dar las gracias a mis compañeros por la buena acogida, cariño y ayuda que me han 
prestado en mis comienzos, así como a todo el equipo del museo por su atención, información y colaboración.


Esta nueva etapa de mi vida me ha dado una nueva ilusión que es la de ver con otra mirada todos los elementos de la vida cotidiana que nos rodean, ilusión por redescubrir el pasado, ver el presente y vislumbrar las tendencias del futuro a través de las exposiciones temporales; todo ello me ha servido de acicate para informarme, aprender y curiosear sobre estas cosas tan cercanas a nosotros, pero sobre todo, mi mayor satisfacción es colaborar en algo que me gusta y ser útil al mismo tiempo, transmitiendo a las personas que visitan el Museo, los conocimientos, historias y anécdotas sobre los objetos expuestos en el mismo y observar que, al final de la visita, se llevan un buen recuerdo, con el deseo, expresado por muchos de ellos, de volver con familiares y amigos y así seguir descubriendo los tesoros que aquí se encierran, y que para mí, particularmente, son una continua caja de sorpresas.

En cuanto a la elección de algún elemento en especial, me resulta muy difícil decantarme por alguno, ¿qué decir de la cocina valenciana? es una joya, ¿de la arqueta florentina?, ¿del significado de los escaparates en la mansión del siglo XVII?, ¿de la porcelana china y cómo llegó y se propagó por todo Occidente? ¿de la casa de muñecas?, y muchos otros objetos muy interesantes tanto por su belleza como por la historia que los rodea.




Todo lo que alberga este Museo tiene su encanto y para conocerlo nada mejor que acercarse a ver estas maravillas con las que se pasarán un rato muy agradable, instructivo y mágico.

¡Muchas gracias Carmen! Aprovechamos para recordar que todo aquel que lo desee puede disfrutar de las visitas guiadas por nuestros voluntarios culturales los domingos a las 11:30 para público individual- sin necesidad de reserva previa - y de martes a viernes y jueves por la tarde para grupos, previa reserva a través del correo electrónico reservas.mnad@mecd.es.
¡Os esperamos!

lunes, 21 de diciembre de 2015

¡¡Ya han llegado los Reyes!!

Ya se respira en el ambiente la Navidad, con sus luces, su música, sus adornos, y por supuesto, ¡sus juguetes!. Este año los Reyes Magos han llegado un poquito antes al MNAD y nos han traído una auténtica joyita que seguro va a hacer las delicias de más de uno. Se trata de una magnífica casita de muñecas de mediados del siglo XIX.
 
CE28758. Casita de muñecas
(150 x 111 x 59 cm)


Esta extraordinaria casa de muñecas fue realizada en Cádiz por el matrimonio Quesada Cangh para sus cuatro hijas Se hizo a través probablemente de encargos realizados a distintos artesanos especializados en mobiliario, metales, cristal, marfil, pintura, tejidos, papeles pintados, alfombras y moquetas y en parte de importaciones, principalmente de Inglaterra, con la que Cádiz mantenía en activo comercio de bienes de consumo. De hecho, ese país gozaba de una larga tradición en la construcción de casas de muñecas, y en la producción de miniaturas para amueblarlas y decorarlas.
 
La casita se compone de tres plantas y siete habitaciones: cocina, comedor, y cuarto de la criada en la planta baja; salón y sala de compañía (o gabinete) en la principal; y tocador y dormitorio de matrimonio en la primera.
 
Reproduce, en suma, la estructura de una morada burguesa española del segundo cuarto del siglo XIX y cuenta con muebles, menaje, estampas, moquetas, papeles pintados y piezas de porcelana, metal, y cristal, además de con sus inquilinos, una criada peinada con moño alto a la moda de los años treinta y cuarenta, una dama joven y una niña de calzón y falda corta completan la familia. Como decimos, refleja con exactitud, a través de encargos locales y piezas importadas, el ajuar y la vida de una familia burguesa pudiente que trata de incorporar detalles de última moda a un mobiliario básico y respetable.
 
El Museo Nacional de Artes Decorativas posee varias casas de muñecas y teatrinos con escenas domésticas de datación posterior. Lo que hace que esta casita sea más importante para el Museo es el hecho de que en ella, los objetos están colocados en contexto, lo que permite evocar con autenticidad cómo era la vida cotidiana española del siglo XIX.
 
Así que ¡ya sabéis!, si queréis disfrutar de esta magnífica pieza, no tenéis más que pasaros por la tercera planta del Museo, ¡os esperamos!.

jueves, 10 de diciembre de 2015

Lo que la colección esconde (XXX): abanico del siglo XIX

En 1870 Mariano Fortuny pintaba La vicaría, uno de los cuadros más alabados del pintor y una muestra excepcional de las relaciones entre Fortuny y el marchante de arte Adolphe Goupil. Los intereses económicos de Goupil llevaron a que en muchos casos las pinturas del catalán se vieran supeditadas a los intereses del propio marchante. La vicaría es fiel reflejo de ello. Siguiendo el género del tableautin y la pintura de casacón, popularizada por Meissoner, Fortuny realizó una obra que ya desde un inicio, tanto por su pequeño formato como por su cercana temática, se presentó como un éxito rotundo.





El tema elegido por el pintor catalán es sencillo: la firma del contrato matrimonial de una pareja. Se piensa que pudo inspirarse para la realización en su propio casamiento, que tuvo lugar en 1867 en la parroquia San Esteban, iglesia en la que también habían contraído matrimonio otras figuras como Mariano José de Larra, Federico de Madrazo, José Zorrilla o Gustavo Adolfo Bécquer. 

En la obra se presenta justo el momento en que los testigos se disponen a firmar el libro de registros para dar fe de la veracidad del enlace. Se ven personajes vestidos con casacas y trajes más a la francesa siguiendo la pintura de Meissonier, pero también aparece algún invitado vestido de torero, mozos, un cura o incluso la figura de un demandero de almas del purgatorio. De este modo se refleja un interés claro por realizar una obra en la que se exponen buena parte de los tipos sociales de la España del XVIII.

El gran éxito de la pintura, que fue vendida en Francia por Goupil en 1870 triplicando el precio de su compra, hizo que se reprodujese en multitud de ocasiones, tomándose más como una representación de amor y el matrimonio que como una muestra de la España del Siglo de las luces.

En nuestro museo tenemos uno de esos testimonios del éxito y la difusión del cuadro de Fortuny. Se trata en este caso de un abanico que puede fecharse en la década de los 90 del siglo XIX. En él se representa la escena del enlace, pero se introducen nuevos elementos, como una alegoría del amor a través de la representación de dos tórtolas u otra de las Bellas Artes, que sirven para enmarcar la escena.

CE17694

Supone por tanto la pieza un destello más de la excelente valoración de la obra de Fortuny y una muestra del incremento del uso y la popularidad de estos instrumentos, que había comenzado ya a desarrollarse a finales del siglo XVIII.

jueves, 26 de noviembre de 2015

Visitas guiadas a "Baquelitas creando futuro"

Hoy os queremos presentar a Fernando Franco Madrid y a María Villarreal Sánchez, estupendos colaboradores que están realizando las prácticas de sus estudios -Máster de Estudios Avanzados de Museos y Patrimonio Histórico Artístico de la UCM el primero, y Grado de Historia del Arte de la UCM, la segunda- en nuestro Museo.
 
Ellos nos van a acompañar a descubrir la fantástica exposición temporal "Baquelitas creando futuro", que ocupa nuestra planta baja del Museo hasta el 17 de enero de 2016. Y para ir abriendo boca a todos aquellos visitantes que quieran venir a conocerla, les hemos preguntado algunas curiosidades sobre la muestra:


-¿Por qué animaríais a la gente a ver la exposición "Baquelitas"?:
"En primer lugar porque es la primera vez que se realiza una exposición monográfica dedicada a la baquelita. Además, a través de las obras de la muestra se puede conocer el origen y la evolución de los primeros materiales plásticos. Por otro lado, al haber sido utilizado en multitud de objetos de uso cotidiano, los visitantes podrán identificar piezas similares a las que hayan tenido en sus hogares o, en caso de los más jóvenes, puedan recordar haberlas visto en casa de sus abuelos. En último lugar, aunque no por ello menos importante, los amantes de la moda "retro" o "vintage" podrán deleitarse con la enorme y variada colección de objetos de todo tipo y procedencia".
 
-¿Conocíais este material anteriormente?:
María: "En mi caso había visto objetos muy parecidos a los que se exponen, pero no conocía el material en sí".
Fernando: "Yo conocía el nombre "de oídas", ya que mi abuelo siempre hablaba de las radios y los teléfonos de baquelita (aún conserva uno, aunque ya no está en uso). Sin embargo, mi idea del material no pasaba de entenderlo como un "plástico duro".
 
-¿Qué pieza destacaríais de la exposición?, ¿por qué?:
María: "Yo no destacaría una obra en sí, sino un conjunto. En este caso, la colección de cajas diseñadas por Eduard Fornells Marco. Me parece interesante que con todos los usos que se ha dado a la baquelita, se hayan realizado piezas de tanto valor estético, tratando de imitar objetos fabricados con materiales suntuosos".
Fernando: "A mí me han llamado la atención los objetos más curiosos, como por ejemplo el calendario de celuloide fabricado por "The British Xylonite Company". Pero si hay una pieza que me ha cautivado es la Radio Philco Transitone. Modelo 49-501 "Boomerang", de 1949. Quizá por la combinación de una imagen clásica en lo material, que recuerda a las antiguas radios de madera, con un nuevo diseño llamativo, sencillo y brillante".
 
 

-¿Cuántas piezas se pueden ver en la exposición?:
"Más de 300 piezas, entre objetos de baquelita y otros materiales plásticos. Además en la sala que recrea el estudio del coleccionista se pueden contemplar mobiliario y material gráfico perteneciente a las propias colecciones del Museo Nacional de Artes Decorativas".
 
-¿Qué es lo que más os ha sorprendido de este material?:
"Los dos lo tenemos muy claro: la infinidad de usos que se le ha dado y la multitud de objetos tan diferentes en los que aparece este material. Ha sido un descubrimiento personal, por lo que invitamos a todos a compartirlo con nosotros".
 
¡Muchísimas gracias Fernando y María!, es un auténtico placer contar con vosotros para descubrir esta original exposición.
 
Para más información sobre las visitas:
  

viernes, 20 de noviembre de 2015

ad+... Javier Álvarez-Santullano

Como sabéis los voluntarios culturales son una parte fundamental de nuestro Museo. Cada semana recorren nuestras salas compartiendo con decenas de personas sus conocimientos sobre cada una de las piezas que alberga nuestro palacio del siglo XIX. 
Hoy os queremos presentar a una pieza fundamental de esta familia. Se trata de Javier Álvarez-Santullano que hoy comparte con nosotros lo que supone para él ser voluntario.

He de dar muchas gracias a la Dirección del Museo Nacional de Artes Decorativas de Madrid pues me ha abierto las puertas al conocimiento de sus exposiciones y biblioteca al pertenecer al colectivo de Voluntarios Culturales en el Museo.

Me encuentro muy a gusto en muchos aspectos; y no sólo en los que afectan a mi salud corporal - concierto citas, me desplazo, me muevo, estoy donde quiero, donde me necesitan - , sino también en mi autoestima personal - me considero más, me fortalezco, me crezco, mejoro.

Javier Álvarez-Santullano

El arte decorativo  cumple una importante función social. Nos tiende un puente hacia las raíces y herencias de nuestros antepasados y las tendencias vanguardistas. Amplía las fronteras culturales. Ilustra los valores y los comportamiento sociales.
En las visitas guiadas y con las personas a las que acompaño realizo un relato visual. Les invito a retroceder en el tiempo y sumergirse en un mundo sorprendente. Pienso que desarrollamos un lenguaje artístico como narradores de sensaciones, por medio de nuestro rol de intercomunicadores.

Es muy gratificante. Las personas a las que acompañamos o vamos a visitar en las visitas a centros de salud y residencias, nos dicen en sus ojos que nuestra labor les es necesaria, atractiva y didáctica; y si encima nos felicitan...¡entonces la reoca! .También mi compromiso y responsabilidad social se ha concretado en proyectos conjuntos con el Museo y soy miembro de la Asociación de Amigos del Museo.

Por otro lado, nunca estoy solo. Siempre voy bien acompañado. El equipo del Museo y el colectivo de voluntarios son personas de calidad; entrega, sacrificio y generosidad son atributos habituales; es lo que hacen siempre; se convierte en hábito, en costumbre. Dominan la cordialidad y el buen humor y me han enseñado lo que sé.

Así pues, estimados lectores, ANIMAOS; acudid a visitar el Museo con la ayuda de las voluntarios culturales y del personal del Museo, a disfrutar del conocimiento de la mano de personas fuera de serie. Gente de Primera División cultural.


Javier en la cocina del siglo XVII 

Javier, muchas gracias por tus palabras, nos emocionan y alegran. Gracias también por compartir tu tiempo, regalar tus conocimientos y acompañarnos en cada nueva aventura que emprende el Museo.  

A nuestros lectores, ¿no os apetece hacer un viaje a través del tiempo con Javier o sus compañeros? Las visitas guiadas a la exposición permanentepara grupos son de martes a viernes por la mañana y jueves por la tarde con reserva previa en la dirección de correo electrónico reservas.mnad@mecd.es. Las visitas para público individual son todos los domingos a las 11:30 en el vestíbulo del MNAD sin necesidad de reserva. Todas las visitas guiadas son gratuitas. ¡Os esperamos!